Matildas Hotel Boutique

Agustinas, 2149

Este jardín privado pertenece a un encantador palacete de estilo francés clásico de inicios del siglo XX, en el barrio Brasil.

El edificio, de tres pisos, fue construido en 1912 por los arquitectos Ricardo Larraín Bravo y Alberto Cruz Montt, y en 2015 fue restaurado por la arquitecta Tatiana Geldrez y abierto al público como hotel boutique, con 17 habitaciones delicadamente ambientadas.

Desde la calle Agustinas se distingue la bien mantenida fachada del edificio. Para llegar al jardín privado se debe atravesar dos particulares pórticos que cautelan el acceso principal al hotel. El primero es un ornamentado portón de metal forjado y el segundo es un portón blanco con paneles y secciones vidriadas con patrones geométricos, por las que se insinúa el jardín interior.

El jardín es de uso exclusivo de los huéspedes -¡qué suerte tienen!-, pero en ocasiones también acoge eventos sociales o artísticos, e íntimos matrimonios. El luminoso y silencioso espacio, desde el que se tiene una vista única del edificio, está compuesto por una terraza rodeada por arbustos de pequeña y mediana altura, y enmarcada por una balaustrada del nivel que conecta al restobar y salón de estar del hotel. El fondo del jardín invita al relajo de los huéspedes con unas reposeras bajo el follaje de palmeras, un plátano oriental y una araucaria centenaria. En el deslinde poniente, a través de la vegetación, se puede entrever un muro de albañilería por el cual trepa una enredadera hasta el techo del edificio.